Mas ¡ay Señora!, que yo me veo oprimido por mis vicios, y cargado con mis culpas y pecados, y no puedo levantarme sin los poderosos auxilios de la divina Chispa, y sin el cortesía de vuestro cuidadoso socorro. Este dolor final es la culminación del duelo de Nuestra Madre, y https://kirkp516hxo2.wikibriefing.com/user